Tradición y creatividad de los artesanos del Valle d'aosta se expresan también en la elaboración del cuero y de la piel
La elaboración del cuero se desarrolló en el Valle de Aosta probablemente en época romana. Se han conservado pocos objetos antiguos: se encuentran todavía alforjas, odres, botas, frascos, zuecos.
Hoy en el Valle de Aosta trabajan muchos artesanos del cuero; producen sobre todo accesorios de atuendo (mochilas, bolsas, carteras, zapatos, cinturones) y artículos de vestuario.
Algunos artesanos fabrican todavía collares para el ganado, arneses para los caballos, "socques" (zuecos con suelo de madera y empeine de cuero) y otros objetos ligados a la tradición y el folklore valdostano.