La riqueza lingüística del Valle de Aosta: el italiano, el francés y los demás idiomas

El el Valle de Aosta, la señalización viaria es bilingüe: está escrita en francés y en italiano. Además, casi todos los nombres de los sitios (topónimos) y los apellidos de las familias originarias del Valle de Aosta proceden del francés.

Entonces, ¿cuál es el motivo del bilingüismo en el Valle de Aosta?

En el año 25 a.C., los romanos fundaron Augusta Praetoria y empezó la latinización de los Salasos, la población local.

En el 575, Pont-Saint-Martin se convirtió en la frontera del reino de los francos, y el reino de Borgoña (área lingüistica galorrománica) anexionó el Valle de Aosta. En el habla, el latín evolucionó hacia el francoprovenzal (el patois hablado aún hoy en el Valle de Aosta), y en la lengua escrita, a partir del 1200, fue reemplazado lentamente por el francés.

En el 1561, el duque Emanuele Filiberto de Saboya adoptó el francés, sustituyendo el latín, para todos los actos públicos en el territorio del ducado. A partir del siglo XVII, el francés se enseñó en el Collège Saint-Bénin de Aosta y en las escuelas rurales, con tal eficiencia que, a finales del siglo XIX, la tasa de analfabetismo resultaba prácticamente nula.

En el 1860, cuando Francia anexionó la región de Saboya, el Valle de Aosta quedó el único territorio de habla francés de Italia. Comenzó entonces la difusión de la lengua italiana, que culminó en el periodo fascista, con la prohibición de usar y de enseñar el francés y con la traducción sistemática de los topónimos.

En el 1948, el Estatuto especial de autonomía del Valle de Aosta establece oficialmente la igualdad del italiano y del francés en el Valle de Aosta.

Pero la riqueza lingüistica del Valle de Aosta va aún más allá: en algunas localidades del valle del Lys la población walser todavía habla dialectos de raíz germánica, el titsch y el toitschu.