Las típicas zapatillas de tejido multicapa del valle de Gressoney fueron concebidas para las faenas agrícolas

D’Socka” y “pioun”, así se llaman en los dialectos walser y franco-provenzal respectivamente las tradicionales zapatillas de tela fabricadas en el valle de Gressoney.

Los primeros escritos que hacen referencia a la vestimenta local y a este tipo particular de calzado datan del siglo XIX.

Las zapatillas, que antiguamente se usaban también para las labores del campo, se confeccionaban a partir de ropa desechada de tejido más bien pesado. Para los días de fiesta, se utilizaban telas de colores vivos que, en el caso de las mujeres, se embellecían con bordados.

Hoy, para la venta, se utilizan bellos tejidos de lana pesada o el "drap". La suela está compuesta de varias capas de tela ensambladas para dar un poco de espesor; después, se cosían vertical u horizontalmente, según la localidad en que se confeccionasen. Este calzado se fabrica para hombres, mujeres y niños.

La cooperativa "D´Socka", de Gressoney-Saint-Jean, especializada en la confección de las zapatillas típicas del Valle de Gressoney en la realización de hermosísimos trajes regionales, se ocupa de la promoción, la valorización y la venta de estos productos.