En tiempos antiguos, la castaña era el alimento base de la dieta campesina, especialmente en los pueblos de media montaña.

En el pueblo de Albard di Bard, para ilustrar la elaboración de este producto, ha sido reconstruida una “grehe”, una característica construcción rural de pequeñas dimensiones de dos pisos, utilizada para secar las castañas.
En el mismo edificio, en el área que antiguamente se utilizaba como depósito, se han expuesto y explicado mediante paneles los utensilios originales para la elaboración de las castañas: el martillo para abrirlas, las pinzas para extraerlas de los erizos, los sacos de cáñamo grueso que se golpeaban contra una raíz de madera para despegar las cáscaras, que después se retiraban agitándolas con un ventilabro (en dialecto llamado “lo van”).

El museo solo es visible desde el exterior.