Los colores del otoño en el Valle de Aosta

Incluso los que asocian el otoño en la montaña con la lluvia y el clima húmedo, en el Valle de Aosta descubren nuevos aspectos de esta estación intimista y misteriosa. El espíritu del otoño reparte colores y matices sobre las copas de los árboles, creando paisajes fascinantes. La magia de los colores otoñales también ha despertado en el Valle de Aosta el interés por el leaf peeping o fall foliage, es decir, la observación y colección de hojas para crear “pinturas de temporada”.

Foliage en el Valle de Aosta: los lugares imprescindibles:
La variedad de especies arbóreas y la presencia de latifoliadas junto a las coníferas, verdes incluso en invierno, garantizan un otoño de tonalidades encendidas en todos los valles de la región, aunque recomendamos algunos lugares imprescindibles para admirar el follaje en el Valle de Aosta:

  • En la pedanía Courtil, a 7 km de Bard , el bosque de hayas compone una paleta de tonos anaranjados y rojos amarronados.
  • En Châtillon , el parque del castillo Passerin d’Entrèves es un extraordinario punto de observación gracias a los árboles monumentales.
    Numerosos arces lo tiñen de rojo en diferentes zonas, hasta el jardín renacentista francés (abierto hasta mediados de noviembre). También en Châtillon, se puede visitar el parque del castillo Gamba en el que viven más de 150 árboles entre los que destacan los coloridos arces y hayas y algunos árboles monumentales.
  • Remontando el Dora, entre el Valle de Brusson y la localidad de Saint-Vincent , se encuentra el bosque mixto del Col de Joux , compuesto principalmente por coníferas, que rodean de un verde brillante el follaje cobrizo y purpúreo de los cerezos silvestres.
  • En Verrès , subiendo la carretera regional del Val d’Ayas, se puede visitar el arboreto Borna di Laou (madriguera del lobo); la variada vegetación puede reconocerse gracias a los carteles que indican su nombre botánico y común. Se encuentran, además de las especies autóctonas, cerezos, fresnos, castaños y nísperos.
  • En Verrayes se encuentra el arboreto Abbé P.L.Vescoz , jardín botánico de especies exóticas: 10.000 plantas, entre ellas algunas variedades de cedro, douglas, ciprés común y secoyas.
  • En la localidad de Entrebin, en el colle de Aosta , se encuentra el Parque de Euntrebeun , que acoge una variedad de aproximadamente 200 especies de árboles con maravillosas cualidades cromáticas, gracias al amarillo de los fresnos y olmos y al naranja de los castaños.
  • En el Val Ferret , sobre Courmayeur , las pistas de fondo se transforman en agradables paseos y las plantas de hoja grande van cediendo poco a poco el paso a los árboles de hoja perenne, mientras que el alerce ofrece colores de contraste amarillos y dorados. También en Courmayeur, en la localidad Plan Gorret, se encuentra el Parque Abbé J.M. Henry en el que puede admirarse el ligustro, el endrino, el escaramujo, la rosa pimpinela, el espino albar, la lantana y la madreselva, además de especies exóticas entre las que destacan un douglas y un abeto gigante.
  • También en la reserva natural del Lago de Villa en Challand-Saint-Victor los cálidos matices de los colores otoñales acompañan a los visitantes en su paseo junto al lago. Hasta el área protegida se puede llegar en coche, pero los aficionados al senderismo pueden llegar recorriendo el itinerario excursionista que empieza en Torille (Verrès).

Itinerarios otoñales mágicos

Otoño por la Vía Francígena
Desde Aosta, siguiendo el antiguo camino de la Vía Francígena y las indicaciones del “Chemin des Vignobles”, se puede llegar a pie, a poca altitud bordeando el valle central, hasta Pont-Saint-Martin, entre viñedos soleados que en otoño se tiñen de cálidas tonalidades. Estos recorridos excursionistas atraviesan una zona famosa por sus vinos y sus numerosas bodegas, en la que los colores otoñales también son el escenario de sugerentes castillos medievales y otros importantes vestigios históricos y artísticos:

Pedalear entre viñedos
Para los aficionados a las dos ruedas, un circuito circular conduce a través de los colores de los viñedos que se extienden entre Gressan y Villeneuve, en los alrededores de Aosta:

Reflejos otoñales en los lagos del Mont Mars
Durante los maravillosos días otoñales, la reserva natural del Mont Mars en Fontainemore regala a los excursionistas las impresionantes vistas de Plan Coumarial y, más arriba, en los bosques y arbustos que rodean el lago Vargno y los lagos Lei-Long y Lac de Barme: