Saint-Vincent
Esta localidad es conocida por la templanza de su clima, hasta el punto que en los años se ha merecido el título de ”Riviera delle Alpi” (Costa de los Alpes) por la presencia de una vegetación típica de las áreas mediterráneas como palmas, olivos y pinos donceles. Su posición favorable, al abrigo de ventos fríos, se acompaña a una combinación feliz de factores que hicieron que, al final del siglo XVIII, Saint-Vincent llegó a ser un destino turístico célebre. El pueblo es famoso por su balneario y por su Casinò, que han atraído la aristocracia y el jet-set italianos e internacionales. Notable también la actividad congresual gracias a unos capaces y modernos centros de conferencias y hoteles y restaurantes de primera categoría.
Este pequeño pueblo termal guarda un alma más popular y tradicional en su vasta colina, donde se encuentran varias actividades agrícolas, espacios naturales protegidos y arquitecturas del pasado.
QUÉ VER
● Iglesia parroquial de San Vincenzo con su museo: fue edificada en el siglo XI sobre un sitio que data de la edad del hierro, convertido en estructura termal en época romana y luego en zona de sepultura al principio de la época cristiana. La iglesia tiene una arquitectura románica, bastante descarnada y sólida, que contrasta con la riqueza de los frescos de los siglos XV y XVI. Se pueden visitar también la cripta del siglo VIII y el museo, que posee unos objetos interesantes.
● Museo de mineralogía y paleontología: la estructura guarda minerales, cristales, piedras duras y fósiles que llegan desde el Valle de Aosta y varias partes del mundo. La exposición propone casi 750 minerales y 170 fósiles.
NATURALEZA Y DEPORTE
En verano, el territorio de Saint-Vincent puede ser explorado tanto a pie, recurriendo los ru, o sea unos antiguos canales de riego, con bicicletas eléctricas, que se pueden fácilmente alquilar, o a caballo. Desde el centro del pueblo se puede subir a lo largo de los antiguos caminos de herradura para descubrir unas capillas, como la de Moron, y unos tesoros arquitectónicos como los raccards, unos edificios rurales en antiguas aldeas como Valmignanaz, los molinos y los hornos, sin olvidar las degustaciones con los productores locales.
Después 15 kilómetros se llega al Col de Joux, un mirador que une el valle central y el medio valle de Ayas. El Col de Joux es un lugar privilegiado para practicar las actividades invernales al aire libre, como unos paseos a pie o unas excursiones con raquetas de nieve.
Por último, la localidad posee varias estructuras deportivas, como un Palacio del deporte con unas piscinas cubiertas y al aire libre, un gimnasio, un estadio, una canchas de bochas, unos campos te tenis al aire libre y un recorrido salud.
FIESTAS Y TRADICIONES
● Carnaval de los pequeños: verdadera institución nacida en los años ’60, este carnaval prevé que por algunos días el pueblo sea “gobernado” por lo niños de las escuelas primarias. Se eligen un alcalde y todo su consejo. Un buen funcionamiento del orden público se obtiene tanto con los cargos políticos como con otras figuras, y entonces se eligen también los guardias municipales, los bomberos y el personal sanitario. No te pierdas el lanzamiento de globos, el desfile de carros alegóricos y la distribución de polenta y salchichas al final del evento.
PARA LOS NIÑOS
Garancia de entretenimiento para los niños son las piscinas del palacio del deporte (dos al aire libre y dos cubiertas). Hay después los varios acontecimientos estivos dedicados a los niños, como animaciones, actividades educativas y entretenimiento.
Los paseos que se pueden hacer en Saint-Vincent y sus alrededores son principalmente fáciles, panorámicas y, entonces, indicadas para los niños también. Los senderos se pueden recurrir a pie, a caballo, pero hay posibilidades también para las bicicletas eléctricas.
Y se llueve, los niños pueden, por ejemplo, descubrir la maravillosa colección de minerales y fósiles del museo de mineralogía y paleontología.
En el periodo navideño las actividades para los niños son aseguradas con animaciones.
RETRATO
● Altitud: 600 m
● Habitantes: 4800
● Cómo llegar con el transporte público:
En autobús: autobús de Milán a Châtillon (reserva obligatoria), después autobús hasta Saint-Vincent, línea “Saint-Vincent (Cillian)-Chatillon-Pontey”.
En tren: hasta la estación de Châtillon/Saint-Vincent, después autobús hasta Saint-Vincent - la vía férrea está temporalmente cerrada, los horarios de los autobuses que sustituyen a los trenes están disponibles en el sitio web de la compañía Trenitalia.
INFORMACIÓN ÚTIL
● Descargar el mapa de la ciudad