Un fabuloso paseo por la Vallée Blanche: 24 km de descenso, de los cuales 18 se realizan por un glaciar con un escenario de incomparable belleza. El recorrido sale de Punta Helbronner (3.466 m) y llega hasta Chamonix (1000 m) siempre con los esquís en los pies. El descenso, que no está señalizado, tiene lugar por entre turbulentos glaciares y agujas graníticas. Normalmente, se necesitan 4-5 horas (descansos incluidos) para llegar a Chamonix: aproximadamente a mitad del recorrido.

Para llegar a Punta Helbronner hay que tomar Skyway Monte Bianco 

Al final de la temporada, el tiempo es más inestable y la falta de nieve puede hacer que sea necesario, en el último tramo, hacer uso de un pequeño tren para llegar a Chamonix y evitar así una larga caminata.
El regreso se regresa a través del Túnel del Mont Blanc.

En los meses de enero y febrero, las condiciones de la nieve y del tiempo suelen ser excelentes en todo el recorrido, predominando las condiciones de nieve invernal. Desde comienzos de marzo y durante todo el mes de abril, el manto de nieve suele estar modificado. En estos meses, es probable que se tenga que recorrer un tramo a pie o en el tren de Montenvers para llegar a Chamonix.

Nivel: esquiadores de nivel medio acostumbrados a las pistas rojas. El nivel puede variar en función de las condiciones del hielo.
Para los más expertos, existe la posibilidad de realizar recorridos alternativos al tradicional.

Equipo: ARVA, pala y sonda.

Nota: los recorridos de alta montaña no están señalizados ni vigilados, por lo que han de considerarse recorridos alpinos o de esquí alpino y es necesario afrontarlos con la preparación y el equipamiento necesarios. Si se aventura por estos recorridos sin guía alpino, lo hace por su cuenta y riesgo.