Hône
Hône es un pueblecito tranquilo situado a la entrada del valle de Champorcher.
Los primeros asentamientos se remontan a la última parte de la Edad del Bronce y a la Edad del Hierro. Así lo atestiguan algunos restos de los asentamientos primitivos denominados barme, protegidos bajo la roca y las piedras a las que se daba forma de cuenco a través de incisiones y que, según algunos estudiosos, se utilizaban en los ritos religiosos y propiciatorios. Hône desempeñó un papel estratégico durante la Edad Media, cuando era propiedad de los Señores de Bard.
El pueblo tiene en su iglesia de San Giorgio, del s XIX., una obra maestra que es además un auténtico tesoro: tres altares de madera tallada y dorada, un púlpito tallado con la leyenda de S. Giorgio, y un espléndido coro también tallado.
Desde Hône arrancan numerosos itinerarios que discurren por los bosques y llegan hasta fascinantes zonas panorámicas, como el camino que lleva al mirador de Pourcil, el sendero que lleva a la Sierra de Biel (1473 m) pasando por los típicos pueblos alpinos de Biel y Courtil o el paseo hacia el imponente despeñadero del Torrente Ayasse.