Este evento se fraguó inicialmente, en 1954, como una apasionante competición reservada únicamente a escultores. Tras algunas ediciones celebradas en Saint-Vincent y en Courmayeur, la Exposición-Concurso se mudó a Aosta y, desde su vigésima edición, se extendió también al resto de sectores de la artesanía tradicional valdostana: tallado, torneado, objetos agrícolas, confección de tejidos, el trabajo con cuero y hierro forjado, juguetes, muebles, atuendos y calzados típicos. Con ocasión de cada una de sus ediciones, la administración regional propone los temas del concurso para cada sector, temas en los que
se centran los artesanos, tras un paciente trabajo de investigación. La Exposición-Concurso es el "buque insignia" de las manifestaciones veraniegas de artesanía valdostana tradicional, tanto por la calidad como la heterogeneidad de las obras que allí se presentan: es la ocasión de afrontar, en clave artística, los principales aspectos de la cultura de esta región. Los temas elegidos por la administración regional comprenden, por mencionar tan sólo algunos, la época medieval del Valle de Aosta, la escuela, el agua y los oficios tradicionales conexos, la familia, la vida del pastoreo alpino, la "veillà" y el aspecto religioso
de la artesanía valdostana. Los objetos allí presentados, que a veces constituyen verdaderas obras de arte, se exponen en la plaza principal de Aosta, bajo una tensoestructura de más de 1 000 m², a la que pueden asistir turistas y amantes del arte para admirar estas obras hasta última hora de la tarde, al tiempo que podrán presenciar la demostración práctica de las técnicas empleadas, que evidencian la pericia y el esfuerzo invertidos en cada una de estas piezas.