En el pueblo principal de Perloz, esta capilla del siglo XVII está dedicada a San Rocco que, en la iconografía artística, suele presentar la concha y el bastón del peregrino como elementos distintivos y así se representa en el fresco central de la fachada.
En el interior, la pintura del altar representa al Santo con el perro, en el acto de levantarse la túnica para mostrar los signos de la peste.