Mont Blanc
Localidad: Courmayeur
Reservada a montañeros expertos y bien entrenados, la ruta italiana desde el refugio de Gonella es la ruta más evocadora para la subida al Mont Blanc. 1.800 metros de desnivel entre espléndidos glaciares y afiladas crestas, una línea sinuosa entre los rincones más salvajes de la vertiente sur del macizo. Inaugurada cuesta abajo por Achille Ratti en 1890, más tarde se convirtió en la "Via Normale Italiana".
Información técnica
Cómo llegar
Peaje de la autopista de Courmayeur; después, continuar hacia el túnel del Mont Blanc. Girar a la izquierda en dirección a Val Veny. En coche, llegar a los aparcamientos públicos (de pago entre las 9.00 y las 19.00 horas) situados en las aldeas de Cuignon, Plan Veny y Fréney y luego tomar los autobuses regulares para llegar a La Visaille.
Descripción del recorrido
Primer día
Desde el Lac Combal (carretera cerrada al tráfico en la localidad de La Visaille), enfilar el sendero que llega al filo de la morena del glaciar del Miage y que continúa hasta el final, donde se entra en el glaciar. Primero hay que caminar por detritos transportados y acumulados por la masa glacial y después por el glacial para llegar a unos quinientos metros más arriba de la confluencia del glaciar del Dôme. Aquí, a la derecha, continuar por un pequeño sendero que describe numerosas curvas y que deja atrás tramos expuestos, algunos de ellos equipados con cables y pequeñas escaleras, hasta llegar a un nevero: subirlo cruzando hacia la derecha y llegar a un espolón rocoso. Finalmente, algunas cuerdas fijas indican el recorrido a seguir: remontar la cuesta rocosa al final de la cual se encuentra el refugio Gonella.
Segundo día
Desde el refugio, entrar en el glaciar del Dôme, que hay que remontar manteniéndose contra la cuesta de las Aiguilles Grises, prestando siempre atención a las brechas. Al llegar a la cresta de las Aiguilles Grises, continuar por la derecha hasta llegar a la cresta de Bionnassay, que termina con el Dôme de Gouter: salir de este por la izquierda para llegar al Col du Dôme, donde la cresta se hace más amplia. Pasar junto a la cabaña-observatorio Vallot, que se encuentra anclada en una franja de pequeñas rocas que afloran del glaciar; después, recorriendo a escalones la cresta nevosa (Arête des Bosses), se llega a la cima.
Descenso: por el itinerario de subida.
La actividad requiere experiencia de alta montaña y es aconsejable ir acompañado por un guía alpino.