Chaligne

El refugio Chaligne nace como resultado de la reestructuración de la típica cabaña alpina de piedra y madera. Se ha dedicado una especial atención al aspecto ecoambiental y al respeto de la arquitectura preexistente, utilizando para ello, principalmente, materiales locales.
El elemento predominante en la decoración es la madera, derivada, en parte, de los trabajos agrícolas de mejora realizados en la zona y tratada con productos ecocompatibles. Los ambientes internos están decorados con gusto y han plasmado la tradición local.
El refugio está dotado de paneles solares para garantizar una producción ecológica de agua caliente, así como la integración del sistema de calefacción en la estación más fría.
El restaurante propone platos y productos típicos de la gastronomía valdostana, haciendo hincapié, en particular, en los productos lácteos procedentes de la actividad de alpicultura de la zona.
Ideal para familias con niños.